miércoles, 20 de febrero de 2013

Santiago 1:19


Santiago 1:19 “Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse.”
Salmos 34:13 “Pues refrena tu lengua de hablar mal, y nunca digan mentiras tus labios.”
Salmos 35:28 “Y mi lengua hablará de tu justicia y de tu alabanza todo el día.”

Pequeña Historia (Anónimo):

El joven discípulo de un sabio filósofo llega a casa de éste y le dice:
-"Oye, maestro, un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia..."-
-"¡Espera!"-, -lo interrumpe el filósofo-. -"¿Ya has hecho pasar por las tres rejas lo que vas a contarme?"-.
-"¿Las tres rejas?"-
-"Sí, las tres rejas. La primera es LA VERDAD. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es absolutamente cierto?"-.
-"No. Lo oí comentar a unos vecinos"-.
-"Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es LA BONDAD. Eso que deseas decirme, ¿es bueno para alguien?"-.
-"No, en realidad no. Al contrario..."-.
-"¡Ah, vaya, vaya! La última reja es LA NECESIDAD. ¿Es necesario hacerme saber éso que tanto te inquieta?"-.
-"A decir verdad, no"-.
-"Entonces"-, dijo el sabio sonriendo, -"si no es verdadero, ni bueno ni necesario, enterrémoslo en el olvido"-.

Es muy sencillo caer en la trampa de decir malas palabras, de hablar mal de otro, de contarle a uno lo que dijo el otro, etc. Pero es difícil mantenerse callado y actuar con sabiduría ante determinadas situaciones. Por ejemplo, cuando voy manejando (ustedes saben, Santo Domingo y los chóferes, otra historia…), la gente comete unas imprudencias que me dan ganas de estrangularlos! Y suelo decir: “Estupido/Estupida!”, y a veces palabras impropias que no son parte de mi vocabulario cotidiano. Entonces, en ocasiones yo misma reacciono y me doy cuenta que no estoy actuando como una hija de Dios, que debo ser mas paciente, y hacer YO las cosas bien, sin importar como actúen los otros.

Nadie nos dijo que sería fácil, ni que no habría tentaciones, incluso Jesús fue tentado, pero no cayó porque se mantuvo firme en oración sabiendo que solo nuestro Dios es capaz de proveernos las fuerzas para enfrentar cualquier situación y para actuar como El nos ha indicado.

Así que chicos/chicas piensen con mucho cuidado antes de hablar y de actuar. Si no es verdad, no es bueno ni es necesario, entonces ¿para qué decirlo?

Y si sienten que una situación sobrepasa su entendimiento humano para actuar correctamente, pídanle a Dios que les muestre el camino y le de resistencia para salir como cristianos victoriosos.

Los quiero mucho (Los de Rochester, vuelvan! Que ya ‘ta bueno).

Saara



2 comentarios:

  1. love it! excelente Saara.

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  2. Excelente Saara, ese triple colador nos hace pensar mejor las cosas y evitar cualquier comentario mal sano. Que Dios nos ayude a procesar mejor las cosas que pensamos antes de abrir la boca, para poder edificar a otros en vez de mal tratarlos. Muchas bendiciones

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